domingo, 15 de abril de 2012

100 días

Ya han transcurrido 100 días desde que Rajoy asumió la Presidencia del Gobierno, y aunque no es un periodo amplio, suficiente para repasar las decisiones tomadas, máxime si recordamos lo que decía cuando estaba en la oposición… cuando lleguemos al poder, generaremos confianza y España dejará atrás la crisis e iniciará inmediatamente el camino de la recuperación….

Pero… NO ha sido así, la situación económica española afectada por una crisis global no ha ofrecido signo de recuperación alguno. Cientos de miles de personas más han caído en el desempleo; en solo en tres meses, el paro registrado ha crecido en más de 200.000 personas y hay 300.000 afiliados menos a la Seguridad Social. La prima de riesgo ha llegado a superar en casi 40 puntos a la italiana, cuando el año pasado se situaba a más de 200 puntos por debajo, los tipos de interés en la subasta de los Bonos a 10 años se han incrementado del 5,01% al 5,37%, la Bolsa española es la única de las grandes europeas que pierde en lo que va de año por encima del 2%; el déficit del Estado se ha incrementado considerablemente en los dos primeros meses del año, en febrero, la desviación se ha cifrado en el 1,94%, lo que representa el 49% más, respecto al mismo periodo del año anterior.

100 días de muchos anuncios y algunas decisiones importantes, de esas que dejan huella, porque han destruido el modelo de relaciones entre empresarios y trabajadores y han abaratado el despido de manera insoportable, porque se abre el camino para la generalización del copago en sanidad pública, porque anteponen intereses partidistas al Estado retrasando la presentación de los Presupuestos Generales del Estado, porque recortan en Educación y suben impuestos ... Y además, con un Presidente instalado en el pesimismo, que hace gala de una ostensible falta de confianza en el diálogo y en la negociación, que aprueba una Reforma Laboral sin gastar una sola hora de diálogo con los sindicatos, que anuncia recortes y más recortes y no da la cara, más bien sale por la puerta trasera, y que si anuncia algo, lo hace fuera de España.

100 días en los que los ciudadanos hemos retrocedido en derechos y contemplamos perplejos a un Gobierno al servicio de Alemania, de los mercados, y que su programa es el despiste y la improvisación.

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