Los cambios en el sistema de pensiones son necesarios por el incremento continuo de la esperanza de vida en nuestro país, cada vez vivimos más años y gozamos de una buena salud.
Esta reforma nace con un horizonte claro, fruto de la necesidad de asegurar la sonstenibilidad de nuestro sistema público de pensiones y pensando en el futuro del país. Una reforma imprescindible debido al aumento continuo de la esperanza de vida y a la evolución de la pirámide de población.
Una reforma necesaria y con un clave objetivo: situar a España al ritmo de las reformas de los países europeos en pensiones y Seguridad Social, para que en el año 2025 ó 2030 el gasto público en pensiones esté en la media europea. Y para conseguir eso, hay que tomar las medidas hoy.
Por eso es el momento de llevar a cabo esta reforma del sistema de pensiones, para que nos permita una aplicación de forma gradual, progresiva y flexible. Y hay que hacerla además porque el gasto público en pensiones y su proyección a medio plazo supone el factor determinante de la estabilidad de las cuentas públicas y eso tiene una gran importancia para la financiación, para la credibilidad y para generar confianza en las cuentas públicas.
Estamos ante la reforma más importante que tenemos que afrontar como país porque afecta a varias generaciones.
Esta reforma nace con un horizonte claro, fruto de la necesidad de asegurar la sonstenibilidad de nuestro sistema público de pensiones y pensando en el futuro del país. Una reforma imprescindible debido al aumento continuo de la esperanza de vida y a la evolución de la pirámide de población.
Una reforma necesaria y con un clave objetivo: situar a España al ritmo de las reformas de los países europeos en pensiones y Seguridad Social, para que en el año 2025 ó 2030 el gasto público en pensiones esté en la media europea. Y para conseguir eso, hay que tomar las medidas hoy.
Por eso es el momento de llevar a cabo esta reforma del sistema de pensiones, para que nos permita una aplicación de forma gradual, progresiva y flexible. Y hay que hacerla además porque el gasto público en pensiones y su proyección a medio plazo supone el factor determinante de la estabilidad de las cuentas públicas y eso tiene una gran importancia para la financiación, para la credibilidad y para generar confianza en las cuentas públicas.
Estamos ante la reforma más importante que tenemos que afrontar como país porque afecta a varias generaciones.
Una de las obligaciones del Gobierno debe ser gobernar para el futuro, esa visión le conlleva a ejercer su responsabilidad para garantizar pensiones dignas a los trabajadores más jóvenes del hoy.
Si reflexionamos las recomendaciones que nacen del Pacto de Toledo podemos destacar varias, como por ejemplo la que hace referencia a la mujer y protección social, donde se pide que se estudie la posibilidad de un incentivo fiscal para que los cónyuges que sin estar en el mercado de trabajo puedan generar pensión; también se reclama el impulsar mecanismos para incorporar los períodos de atención a hijos o dependientes como elementos a considerar en las carreras de cotización; o como que el sistema atienda la dimensión de género en materia de pensiones, ya que actualmente todavía las discriminaciones gravan más intensamente a las mujeres que a los hombres.
Si reflexionamos las recomendaciones que nacen del Pacto de Toledo podemos destacar varias, como por ejemplo la que hace referencia a la mujer y protección social, donde se pide que se estudie la posibilidad de un incentivo fiscal para que los cónyuges que sin estar en el mercado de trabajo puedan generar pensión; también se reclama el impulsar mecanismos para incorporar los períodos de atención a hijos o dependientes como elementos a considerar en las carreras de cotización; o como que el sistema atienda la dimensión de género en materia de pensiones, ya que actualmente todavía las discriminaciones gravan más intensamente a las mujeres que a los hombres.
Todas estas medidas son necesarias atenderlas ahora y asegurarlas para el futuro.
Es verdad que todas las reformas son mejor si nacen fruto del consenso y respaldo social, de ahí el empeño del Gobierno de llegar a acuerdos con los sindicatos y los empresarios, además de con todos los grupos políticos, ojalá así sea...
1 comentarios:
Existen muchas alternativas que no se han puesto sobre la mesa y me gustaría saber tu opinión:
- Aumento de la productividad. En los años 70 para sostener un jubilado hacía falta 6 trabajadores, hoy son 4. Dentro de 50 años que son las cuentas que nos han presentado para justificar este desmán contra los trabajadores ¿Cuántos harán falta? Se supone que menos, ¿no?
- Creación de impuestos para suplir lo que hipoteticamente no cubrirían los trabajadores a través de la Caja de la Seguridad Social. No tiene porque estar separado, sería una necesidad básica de la sociedad como es la educación. ¿No?
- Aumentar lo que se retiene en la nómina para esta caja. Para que se lleven el gato el agua los bancos con los planes de pensiones mucho mejor en la Caja de la Seguridad Social. Ese dinero en manos de los banqueros sirve para especulación y para usarlo contra los trabajadores. ¿no?
- Quitar (o no) la X de la Iglesia y dar la opción al trabajador en su declaración para que parte de sus impuestos vaya para las pensiones.
- Aumentar el número de trabajadores.
Además recuerdo que cuando comencé a estudiar en la universidad a mediados de los noventa ya nos amenazaban con que no llegarían las pensiones para pocos años, si no recuerdo para el año 2000. Resulta que no sólo llegaron si no que en el 2010 con la crisis que tenemos tiene superavit.
- La demografía a 50 años vista es ciencia ficción. Hace 15 años comenzó en este país un fuerte movimiento migratorio que trajo mano de obra joven.
Como te he dicho, no te pongo estos comentarios como reproche. Simplemente me gustaría que un representante del pueblo en el parlamento me los debatiera.
Gracias
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