Recordando a Fernando Múgica...

El pasado 9 de marzo se presentó en el Círculo de Bellas Artes de Madrid el libro titulado “Recuerdo de Fernando Múgica”. Un libro editado por Txiki Benegas y publicado por la Fundación Pablo Iglesias que más que un homenaje se trata de un acto de compañerismo para con el militante socialista que fue asesinado por ETA hace 15 años, un seis de febrero de 1996.
Y es que, una de las maneras que tenemos los demócratas para luchar contra el terrorismo es mantener vivo el recuerdo, y ese es el principal objetivo de este libro: recordar y mantener viva la lucha contra el terrorismo. Este libro le dice a ETA que, aunque mataron a Fernando Múgica, su recuerdo nos sirve a los socialistas para tener más fuerza y no cesar en el empeño de intentar conseguir lo que nuestro compañero quería y por lo que siempre luchó: un Euskadi en PAZ.
Fernando Múgica, asumió la Presidencia del Partido Socialista de Euskadi cuando ETA asesinó a Enrique Casas; un duro momento en el que el compañero Múgica se dedicó en cuerpo y alma a mantener vivas las estructuras del partido, fue un verdadero militante socialista entregado a su partido, pero sobre todo, se dedicó a sostener el ánimo de sus compañeros, porque en esos momentos ser socialista y vasco era una heroicidad.
Y en éste hecho se basa la historia de este libro, donde se hace un recorrido por la dura historia vivida por el socialismo vasco desde entonces hasta ahora. El texto está repleto de anécdotas, de un rico castellano (propio del protagonista según decían sus amigos en la presentación), un texto adornado de ironía y sentido del humor característico de Múgica. Gracias a estas páginas el lector podrá conocer a un hombre enamorado de su trabajo y a alguien que dedicó su vida a su mujer y a sus tres hijos, a ese compañero que ayudaba a los que no tenían documentación a pasar la frontera durante el franquismo.
El libro es un claro reflejo del estilo personal y característico del propio Fernando, afirmó Txiki, un socialista de personalidad fuerte y valiente, en el que destacaba su crítica permanente del nacionalismo y su anticlericalismo explosivo.
Sirva pues, este libro y esta columna de hoy para recordar y dar testimonio de una persona de bien que vivió su vida apasionadamente.

“Jamás voy a dejar mi tierra en manos de unos asesinos”,
afirmaba Múgica