La mayoría de
la comunidad educativa considera que la LOMCE es la peor ley educativa de la
democracia. No cuenta con apoyo social
ni de ningún sector educativo: ni alumnado, ni padres y madres de alumnos, ni colectivos
profesionales y sindicales vinculados a la enseñanza, ni directores de centros
públicos, ni por supuesto del profesorado.
Y a nivel
político… una Ley que ha sido elaborada, modificada y aprobada en solitario por
el PP, sin consenso ni pacto social alguno. Hasta la Conferencia Episcopal
discrepa.
Es la Ley
educativa que más rechazo y movilizaciones ha suscitado.
La LOMCE se
está implantando con grandes recortes de presupuestos y de profesorado,
perjudicando gravemente al alumnado, y a los padres y madres de alumnos, sin
formación para los docentes, en medio de la más absoluta improvisación en la
elaboración de los currículos, con unos criterios de evaluación y unos
estándares de aprendizaje en muchos casos, absurdos e imposibles.
Con esta
celeridad y recorte abusivo es imposible realizar todo el desarrollo normativo
y de trabajo en los centros que requiere su implantación, si se quiere cumplir
con la normativa y al mismo tiempo trabajar con la honestidad y profesionalidad
que requiere la formación docente.
Por todo ello,
se ha reclamado en numerosas ocasiones una moratoria en la aplicación de la
LOMCE el próximo curso en Aragón en Secundaria y Bachillerato ante la reducción
de los plazos impuestos. Porque un cambio tan radical como es la LOMCE requiere
una planificación adecuada, por las adaptaciones que implica, tanto en los
centros, como en los proyectos educativos.
En el actual
curso, ya se ha empezado mal, con situaciones caóticas en Primaria y Formación
Profesional Básica, con atropellos administrativos, dada la tardanza en
desarrollar los currículos, la falta de libros y de materiales educativos
adecuados. Euskadi, Navarra, Asturias, Andalucía, Cataluña y Canarias ya han
solicitado una moratoria y han tomado medidas administrativas y jurídicas para
evitar en sus territorios la aplicación de esta reforma educativa.
Aragón, asume
todas las aplicaciones de la nueva norma, TODAS porque la Sra. Rudi y la Sra.
Serrat son sumisas a las órdenes de Wert y Rajoy, aunque éstas sean en
detrimento de la enseñanza pública.
Así que desde
aquí animo a toda la comunidad educativa a frenar la LOMCE porque ataca
directamente a la Escuela Pública y a la Igualdad de Oportunidades.
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