El Gobierno pone en marcha medidas para ahorrar energía, para ahorrar una parte de ese incremento de la factura energética derivado de la crisis del norte de África, fundamentalmente de Libia y Egipto porque nos proporcionan una parte del petróleo y exporta gas.
Medidas que entrarán en vigor el próximo 7 de marzo, y que se impulsan porque ha subido la factura energética afectando al conjunto de ciudadanos y a todo el país. Medidas que no se toman porque haya riesgo de suministro, podemos estar tranquilos en cuanto al suministro de gas y petróleo en nuestro país.
Lo cierto, es que esta crisis está repercutiendo en el precio, básicamente de los combustibles, gasolina, y eso, nos afecta a todos; por ejemplo, en los últimos días el petróleo ha subido 10 € barril lo que supone para nuestra factura energética en torno a 6.000 M€ más (1 billón de las antiguas pesetas). Por tanto, un crecimiento importante para un país dependiente del petróleo, que afecta lógicamente al consumo y a la vida de los ciudadanos que lo pagamos cuando llenamos el depósito de gasolina. Este es el motivo que ha impulsado al Gobierno a tomar medidas de distinto tipo. Algunas, afectan a la velocidad en nuestras carreteras, otras al precio del transporte público, otras al biodiesel en las gasolinas; pero todas, buscan ahorrar petróleo y gas, es decir, disminuir el crecimiento de la factura energética producido estos días.
La medida de reducir la velocidad máxima en las autovías y autopista de 120 km/h a 110 km/h, busca ahorrar petróleo, o lo que es lo mismo, gasolina. Esta reducción de 10 km/h supone un 15% en gasolina y un 11% en gasóleo. Este cambio supondrá un conjunto de cambios en la señalización y en las multas, pero no en el carné por puntos puesto que esta medida no tiene que ver con la seguridad vial sino con el consumo y el ahorro energético.
La referida a rebajar el precio de los billetes y de los abonos de RENFE de media distancia y cercanías hasta un 5%, busca por un lado fomentar el transporte público, y por otro ahorrar gasolina. Junto a esta medida se lanzarán campañas de promoción del transporte público, que siempre son necesarias pero ahora, más que nunca.
Respecto a elevar al 7% el porcentaje de biodiesel en las gasolineras (actualmente 5,8%), lo mismo, busca ahorrar gasolina.
Junto a estas medidas de ejecución inmediata, en los próximos días se van a acordar un conjunto de medidas con las Administraciones Públicas a través de la FEMP, referentes al ahorro energético en materia de iluminación; y se va a crear un grupo de trabajo con las empresas y los grandes distribuidores para seguir día a día la evolución de la energía, básicamente de los precios del petróleo, aunque también de la distribución de gas.
Actitud por tanto, previsora del Gobierno y dirigida fundamentalmente a disminuir el coste que esta crisis del norte africano provoca en nuestra factura energética.
Medidas que entrarán en vigor el próximo 7 de marzo, y que se impulsan porque ha subido la factura energética afectando al conjunto de ciudadanos y a todo el país. Medidas que no se toman porque haya riesgo de suministro, podemos estar tranquilos en cuanto al suministro de gas y petróleo en nuestro país.
Lo cierto, es que esta crisis está repercutiendo en el precio, básicamente de los combustibles, gasolina, y eso, nos afecta a todos; por ejemplo, en los últimos días el petróleo ha subido 10 € barril lo que supone para nuestra factura energética en torno a 6.000 M€ más (1 billón de las antiguas pesetas). Por tanto, un crecimiento importante para un país dependiente del petróleo, que afecta lógicamente al consumo y a la vida de los ciudadanos que lo pagamos cuando llenamos el depósito de gasolina. Este es el motivo que ha impulsado al Gobierno a tomar medidas de distinto tipo. Algunas, afectan a la velocidad en nuestras carreteras, otras al precio del transporte público, otras al biodiesel en las gasolinas; pero todas, buscan ahorrar petróleo y gas, es decir, disminuir el crecimiento de la factura energética producido estos días.
La medida de reducir la velocidad máxima en las autovías y autopista de 120 km/h a 110 km/h, busca ahorrar petróleo, o lo que es lo mismo, gasolina. Esta reducción de 10 km/h supone un 15% en gasolina y un 11% en gasóleo. Este cambio supondrá un conjunto de cambios en la señalización y en las multas, pero no en el carné por puntos puesto que esta medida no tiene que ver con la seguridad vial sino con el consumo y el ahorro energético.
La referida a rebajar el precio de los billetes y de los abonos de RENFE de media distancia y cercanías hasta un 5%, busca por un lado fomentar el transporte público, y por otro ahorrar gasolina. Junto a esta medida se lanzarán campañas de promoción del transporte público, que siempre son necesarias pero ahora, más que nunca.
Respecto a elevar al 7% el porcentaje de biodiesel en las gasolineras (actualmente 5,8%), lo mismo, busca ahorrar gasolina.
Junto a estas medidas de ejecución inmediata, en los próximos días se van a acordar un conjunto de medidas con las Administraciones Públicas a través de la FEMP, referentes al ahorro energético en materia de iluminación; y se va a crear un grupo de trabajo con las empresas y los grandes distribuidores para seguir día a día la evolución de la energía, básicamente de los precios del petróleo, aunque también de la distribución de gas.
Actitud por tanto, previsora del Gobierno y dirigida fundamentalmente a disminuir el coste que esta crisis del norte africano provoca en nuestra factura energética.
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