Para salir delante de esta crisis brutal, la credibilidad y la solvencia son factores fundamentales. Factores que todos debemos priorizar para defender los intereses del país y para generar confianza y fortaleza.
Estos factores se refuerzan con datos como los que señalan que las previsiones del Gobierno en ingresos del Estado se están cumpliendo al 99%. Así lo indica el informe de los ingresos hasta el mes de abril, el último dato disponible, que dice que ascienden a 63.350 M€, un 4,1% más que en el primer cuatrimestre de 2010. Este hecho, es lo que está permitiendo, junto al 20% de contención de los gastos, reducir el déficit público en lo que va de año en un 53%, situándolo en el 0,22 del PIB. Por tanto, el Gobierno está cumpliendo con sus previsiones.
Datos como este deberían ser aplaudidos por todos, incluyendo al Partido Popular, que, o están ciegos y no ven que hay que tirar del carro todos juntos o, lo que sería infame, están en el “cuanto peor, mejor”, y no quieren reconocer que se cumplen las previsiones del gobierno porque esto no les beneficia. Rajoy debería reconocer la validez objetiva de las cifras, debería ayudar a ganar credibilidad y dejar de intentar dañar a su país con la tergiversación y la mentira. Pero claro, él solo piensa que si salimos de la crisis tendrá más difícil ganar las elecciones. Este país no se merece un líder de la oposición que piense antes en su interés que en el de todos los ciudadanos.
Estos factores se refuerzan con datos como los que señalan que las previsiones del Gobierno en ingresos del Estado se están cumpliendo al 99%. Así lo indica el informe de los ingresos hasta el mes de abril, el último dato disponible, que dice que ascienden a 63.350 M€, un 4,1% más que en el primer cuatrimestre de 2010. Este hecho, es lo que está permitiendo, junto al 20% de contención de los gastos, reducir el déficit público en lo que va de año en un 53%, situándolo en el 0,22 del PIB. Por tanto, el Gobierno está cumpliendo con sus previsiones.
Datos como este deberían ser aplaudidos por todos, incluyendo al Partido Popular, que, o están ciegos y no ven que hay que tirar del carro todos juntos o, lo que sería infame, están en el “cuanto peor, mejor”, y no quieren reconocer que se cumplen las previsiones del gobierno porque esto no les beneficia. Rajoy debería reconocer la validez objetiva de las cifras, debería ayudar a ganar credibilidad y dejar de intentar dañar a su país con la tergiversación y la mentira. Pero claro, él solo piensa que si salimos de la crisis tendrá más difícil ganar las elecciones. Este país no se merece un líder de la oposición que piense antes en su interés que en el de todos los ciudadanos.
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